Cold Brew: El arte de preparar café sin calor
A diferencia del café tradicional, el Cold Brew no se prepara con agua caliente. En su lugar, se mezcla café molido con agua fría y se deja reposar durante varias horas. Este proceso permite que los sabores se desarrollen de manera más completa, lo que da como resultado un sabor suave y rico.
Descubre el sabor máximo con la cafetera para café frío
La cafetera Cold Brew te permitirá disfrutar del mejor café sin necesidad de calentar agua. Aunque pueda parecer increíble, podemos asegurarte que es totalmente cierto. Con esta cafetera, podrás extraer el máximo sabor de café que utilices gracias a su diseño especial.
Con este sistema de preparación en frío, podrás obtener un delicioso café helado. Puedes almacenarlo en el refrigerador y disfrutar de una taza en cualquier momento del día.
Un café helado excepcional y siempre listo para disfrutar
Para preparar un café de calidad, simplemente agrega aproximadamente 40 gramos de café y 600 ml de agua (estas cantidades son solo una guía). Luego, cierra la tapa de la cafetera y déjala reposar en el refrigerador de 8 a 24 horas. La cafetera Cold Brew está fabricada con vidrio de la mejor calidad e incluye un filtro permanente. Si estás pensando en adentrarte en el mundo del café helado y disfrutar del increíble sabor que este producto puede ofrecerte, te recomendamos la Cold Brew.
Este producto cuenta con cristal resistente al calor y puede ser lavado en lavavajillas. Está fabricado con polipropileno, resina de poliéster, caucho de silicona y vidrio. Viene en colores transparente y marrón, con una capacidad de aproximadamente 600 ml (equivalente a 3 tazas). Su peso es de 500 gramos y sus dimensiones son W138×D94×H208mm Φ88mm.
Beneficios de la Cafetera Cold Brew
Además de su sabor rico y suave, el Cold Brew tiene muchos otros beneficios. Por ejemplo, el proceso de infusión en frío permite que los antioxidantes y los nutrientes del café se conserven de manera más completa. Esto significa que el Cold Brew es una bebida más saludable que el café tradicional.
Además, el Cold Brew es una bebida muy versátil que se puede disfrutar de muchas maneras diferentes. Puedes tomarlo caliente o frío, y agregarle leche o crema para darle un sabor diferente. También puedes agregarle jarabes o especias para personalizar tu bebida.